Es un sector que a lo largo de la historia ha apoyado profundamente el desarrollo de este país en distintas áreas en donde el gobierno muchas veces por sus políticas o por el escaso manejo de sus recursos de forma eficiente desatiende.
Las empresas son vehículos para apoyar a este sector y esta actividad de aportar recursos para que una entidad con un fin específico apoye a ciertos sectores que van de forma muy variada, desde cuestiones humanitarias, ecológicas, ciencia, tecnología, educación, etcétera.
No podemos afirmar que todas las donatarias hacen una gran labor, hay que regularlas y muchas veces esas regulaciones que tienen justificación en el fin que persiguen, a veces pierden de vista el objetivo. Una cosa es controlar regular o transparentar y otra cosa es dificultar, obstaculizar e inclusive impedir el logro de los objetivos, entonces ahí se requiere de mucha coordinación para que las normas cumplan su objetivo que es el cuidar el sistema fiscal, pero por otro lado que no entorpezcan el trabajo de estas organizaciones.
En nuestro país en época reciente este sector ha sido altamente apreciado, recordemos los temblores, los incendios, las inundaciones recientes más la pandemia donde este sector ha sido de enorme ayuda para quienes han padecido las consecuencias, las secuelas de estas amenazas al ser humano y a la naturaleza, entendiendo que lo hacen con esa vocación, por esa voluntad de ayudar al camarada porque no necesariamente tiene que ser nacional. Ahorita nuestras organizaciones de la sociedad civil están también enfrentando el problema de la migración con lo que está pasando en Chiapas y en la frontera norte donde están algunas de las organizaciones.
Siempre ha habido mecanismos para tratar de identificar que sectores son los que deben tener cierto régimen fiscal favorable para que con esos recursos que obtienen puedan destinarlos a sus actividades y hay una política que tristemente en los últimos años se ha rigidizado hasta hacia este sector, inclusive ese sistema que no solamente es de normas sino de apoyos económicos del gobierno también se ha rigidizado, es decir hay una circular emitida por el presidente actual el catorce de febrero de 2019 donde da una instrucción precisa a todas las organizaciones del sector Público que se suspenda cualquier apoyo o ayuda que se entregaba con base en un programa de presupuesto etcétera.
En el sexenio de Felipe Calderón le dijeron: necesitamos hacer que este sector sea auto sustentable es decir vivir solo de donativos como hay muchas donatarias que solo viven de donativos y que por la dificultad que ha representado para los donantes continuar con eso, más las restricciones que han puesto las autoridades limitando el monto de los donativos ha hecho que muchas de las donatarias estén sufriendo para sobrevivir entonces qué hacen esas que sufren para sobrevivir, organizan bazares, carreras, manufacturan cosas y las venden, todo eso son ingresos que ayudan a generar sustento para poder cumplir con el objetivo cuando no se tiene suficiente apoyo de donativos, entonces esto lo captó en su momento y Calderón emitió un decreto que se mantuvo vivo incluso hasta Peña Nieto de tal manera que ese decreto se renovaba en la ley de ingresos hasta que el primero de diciembre del 2018 cuando toma posesión el presidente Andrés López lo que hace es en la ley de ingresos para el ejercicio 19 desaparece el decreto.
Entonces, las donatarias a partir de ese momento ya tienen que aplicar con todo rigor el pago del impuesto sobre la renta si se pasan de ese 10% y luego vino en 2021 el tope de que si te pasas del 50% pierdes la autorización de donataria.